Las Brigadas de los Mártires de Al-Aqsa atacaron una posición de soldados enemigos y un autobús que transportaba colonos en la ciudad de Yenín.
Las Brigadas de los Mártires de Al-Aqsa-Juventud de la Venganza y la Liberación-Tulkarem atacaron un puesto de control militar israelí en el asentamiento Dotan y un autobús que transportaba colonos en la carretera de circunvalación al oeste de Yenín.
En otra acción, los combatientes también agredieron con armas automáticas el puesto de control israelí de Sanuz, al oeste de Tulkarem.
Todas las acciones responden a la masacre de la ocupación israelí en Rafah y a sus constantes crímenes en la Franja de Gaza, afirmaron.
El domingo, las fuerzas israelíes asesinaron al niño Majd Aramin, de 14 años, cerca del pueblo de Sair, al norte de Hebrón, en el sur de Cisjordania.
Sus asesinos alegaron que el menor intentaba realizar un ataque con arma blanca y después de dispararle y herirlo impidieron a los servicios de emergencia palestinos asistirlo y lo dejaron desangrar en el suelo hasta su fallecimiento.
Además, las tropas agresoras enviaron refuerzos al lugar, impusieron un cerco de seguridad y realizaron una operación de búsqueda y registro.
Con esta muerte, el número de caídos en Cisjordania y Jerusalén desde el 7 de octubre pasado ascendió a 519, dos centenares de ellos durante el actual año, informó la institución.
Fuente: Al Mayadeen