El Congreso ha aprobado por unanimidad la creación de una subcomisión, en el marco de la Comisión de Sanidad de la Cámara, que se dedicará únicamente a la salud mental y de la que emanará un documento consensuado que se remitirá al Gobierno con las propuestas de agentes sociales, profesionales, sanitarios, científicos e institucionales en la protección, prevención, lucha y atención.
Se trata de una iniciativa liderada por el PP que finalmente verá la luz al haber contado con el respaldo unánime de todos los grupos y que representará una apuesta más por la salud mental, una necesidad evidenciada por datos como el diagnóstico de patologías mentales en uno de cada diez ciudadanos mayores de 15 años, que el 6,7 % de la población sufre ansiedad y que los trastornos graves alcanzan a más del 3 % de personas.
Y también por cifras aún más graves: que los suicidios en menores de 30 años han aumentado un 7,9 %, consolidándose como su primera causa de muerte absoluta (por delante de los accidentes de tráfico y los tumores) y en 2022 un 41,5 % -75 en total- de adolescentes entre 15 y 19 se quitaron la vida respecto al año anterior.Por el PSOE, María Carmen Castilla, ha destacado la sensibilidad del conjunto del Congreso en torno a este asunto y ha indicado que la subcomisión, siguiendo las recomendaciones de organismos internacionales como la Organización Mundial para la Salud, se enfocará en un trabajo multidisciplinar ya que existen muchos condicionantes para la salud mental como el entorno socioeconómico, la precariedad laboral, las adicciones y el nuevo contexto social emanado de la pandemia.
Rafael Cofiño, de Sumar, ha incidido en que su grupo apuesta por trabajar principalmente sobre el abordaje del contexto en el que viven las personas para entender, tratar y prevenir los problemas de salud mental y ha pedido que el suicidio se trate como "una problemática social" que va más allá de las competencias del propio Ministerio de Sanidad y de las consejerías del ramo en las comunidades.
Vox, a través de su diputado David García, ha apuntado que parte del problema de la salud mental en España obedece a falta de medios humanos, profesionales y materiales agudizado tras la pandemia y ha apelado a la necesidad de concienciar a la población que ir al psicólogo "no es grave", ni tiene que ser visto como "un problema que te vaya a causar marginación", sino como una visita al médico cuando se tiene una dolencia.
Los portavoces de ERC, Bildu y PNV han reclamado que el documento que emane de la subcomisión no invada competencias autonómicas ya que en cada territorio, en alusión a Cataluña y País Vasco, hay en marcha planes para la salud mental, pero han apostado por el consenso y la cooperación para dar un salto cualitativo en la atención a esta enfermedad, con raíces multifactoriales, en cualquier parte del territorio.