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Israel ha asesinado en un mes a tantos palestinos como en los últimos 23 años

 



Según cifras de la organización B’tselem, más de 10.559 palestinos han muerto a manos de las fuerzas israelíes desde el2000 hasta el pasado 6 de octubre. Las víctimas en el último mes llegan a 10.328 y más de 2.000 desaparecidos.

Las cifras son tan abultadas que se corre el riesgo de perder las referencias con cada nueva actualización. En solo un mes de guerra, Israel ha matado a casi a tantos palestinos como en los últimos 23 años, según el recuento pormenorizado que elabora el Centro de Información Israelí para los Derechos Humanos en los Territorios Ocupados, más conocido como B’tselem.

Las autoridades de la Franja de Gaza, gobernada por el movimiento islamista Hamás, han cifrado este martes en 10.328 los palestinos muertos en los bombardeos israelíes, que no han cesado desde el ataque de las milicias palestinas del pasado 7 de octubre. Entre las víctimas se incluyen 4.237 menores, casi la mitad. Se trata de una matanza indiscriminada de una envergadura nunca vista en ninguna de las operaciones militares israelíes sobre la Franja de Gaza en la última década.

La exhaustiva base de datos de B’tselem contabiliza las víctimas de este largo conflicto desde el 29 de septiembre del 2000 hasta el 6 de octubre de 2023, la víspera los ataques coordinados de los grupos armados palestinos sobre territorio israelí, que han causado más de 1.400 muertos.

En ese tiempo, algo más de dos décadas, las fuerzas israelíes han asesinado a al menos 10.559 palestinos. Casi 8.000 murieron en la Franja de Gaza, más de 2.600 en la Cisjordania ocupada y en Jerusalén Este, y unos 120 en territorio israelí. A esta cifras habría que sumar casi un centenar de palestinos asesinados por civiles israelíes.

A los 10.328 fallecidos en Gaza se suman más de 2.200 desaparecidos bajo los escombros producidos por los bombardeos, entre los que hay casi 1.300 niños. También durante el pasado mes, más de 160 palestinos fueron asesinados por las fuerzas de seguridad israelíes o los colonos extremistas judíos, que cuentan con total impunidad y plena connivencia de las autoridades israelíes.

El balance de esta matanza indiscriminada por parte de Israel se acerca mucho a los dramáticos números de los últimos 23 años, y los calificativos de genocidio y limpieza étnica se escuchan en cada vez más voces. Entre ellas, las de un comité de expertos de las Naciones Unidas, organismo cada vez más duro en sus críticas y al que ahora Israel acusa de amparar el terrorismo.

Más muertos que en siete operaciones militares

Desde la operación Plomo Fundido (diciembre de 2008- enero de 2009), Israel ha lanzado ataques aéreos indiscriminados contra Gaza en otras seis ocasiones, como represalia a diferentes ataques de las milicias palestinas. La última, llamada Espadas de Hierro, dio paso a la actual guerra. En todas estas operaciones militares contra la Franja, Israel ha matado a entre 3.800 y algo más de 4.000 palestinos, según datos de Naciones Unidas y de B'tselem. En esta ocasión, las víctimas, sin contar heridos y desaparecidos, ascienden a más del doble, la mayoría niños y mujeres.

Más muertos que en siete operaciones militares

Desde la operación Plomo Fundido (diciembre de 2008- enero de 2009), Israel ha lanzado ataques aéreos indiscriminados contra Gaza en otras seis ocasiones, como represalia a diferentes ataques de las milicias palestinas. La última, llamada Espadas de Hierro, dio paso a la actual guerra. En todas estas operaciones militares contra la Franja, Israel ha matado a entre 3.800 y algo más de 4.000 palestinos, según datos de Naciones Unidas y de B'tselem. En esta ocasión, las víctimas, sin contar heridos y desaparecidos, ascienden a más del doble, la mayoría niños y mujeres.

"La pesadilla en Gaza es más que una crisis humanitaria. Es una crisis de humanidad", aseguró el martes el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres. Previamente lamentó que los "horribles" ataques de Hamás de hace un mes "no surgieron de la nada", pues el "pueblo palestino lleva sometido a 56 años de asfixiante ocupación" por parte de Israel.

Diez veces más ataques que en Ucrania el primer mes

La magnitud de este asedio e invasión israelí en Gaza no tiene precedentes en los últimos conflictos recientes, desde Ucrania a Siria. Es así tanto en el número de víctimas mortales, en infraestructura dañada y en ataques lanzados. Datos publicados por El País citando a fuentes israelíes, al Centro de Operaciones Aéreas Combinadas de EEUU (CAOC) y al Armed Conflict Location & Event Data Project (ACLED), dejan claro que Israel ha superado en diez veces los ataques aéreos lanzados durante el primer mes de la invasión rusa de Ucrania.

Todos los parámetros para medir la debacle que vive la Franja marcan récord. La ONU cifra en 89 los trabajadores de su agencia (UNRWA) en Gaza que han muerto en los ataques de Israel. Nunca en su historia había sido asesinado tanto personal de Naciones Unidas en un conflicto armado.

Colapso del sistema sanitario

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha documentado hasta 216 ataques contra centros e instalaciones sanitarias desde el 7 de octubre. De ellos, 93 en la Franja de Gaza, que han afectado a 39 en hospitales, de los que 22 están dañados, y a 28 ambulancias. Otros 123 se han registrado en la Cisjordania ocupada, 102 contra ambulancias, que incluyen obstrucción deliberada de la atención médica, 19 detenciones de personal, y 12 allanamientos militares en centros sanitarios.

Además, al menos 16 trabajadores sanitarios han muerto en ataques mientras realizaban sus tareas, según la OMS. El 40% de los hospitales en Gaza no pueden funcionar por la falta de combustible para generar energía, el 64% de los centros de atención primaria están cerrados, así como el 59% de los servicios sanitarios básicos de la UNRWA.

La prensa palestina, objetivo de Israel

La prensa palestina es otro de los grandes objetivos alcanzados en los bombardeos israelíes. Desde que estalló el conflicto han muerto 41 periodistas: 36 son reporteros palestinos asesinados por ataques de Israel; los milicianos de Gaza mataron a tres periodistas israelíes durante su incursión del 7 de octubre; y un fotoperiodista de Reuters perdió la vida en un bombardeo israelí al sur del Líbano en el que resultaron heridos otros seis reporteros de AFP, Reuters y Al Jazeera. Además, la aviación hebrea ha destruido total o parcialmente más de 50 locales donde se ubicaban medios de comunicación, según Reporteros Sin fronteras.

Periodistas palestinos han denunciados amenazas específicas del Ejército israelí contra ellos y sus familias, incluso ataques dirigidos contra sus viviendas. Wael Al-Dahdouh, jefe de la oficina de Al Jazeera en la ciudad de Gaza, perdió a su mujer, sus dos hijos y su nieto en un bombardeo israelí. No es el único caso.

El reportero de Palestina TV Mohamed Abu Hatab fue asesinado el pasado jueves junto a 11 familiares entre los que se encuentran su mujer, su hijo y su hermano. "No podemos soportarlo más, estamos exhaustos. Vamos a ser asesinados, es solo cuestión de tiempo. No hay protección. Este chaleco no nos protege. Nada protege a los periodistas. Perdemos vidas, una tras otra", dijo en directo su compañero Mohamed Abu Hatab mientras se quitaba el chaleco y el casco.

1,5 millones de desplazados forzosos

“Es el mayor desplazamiento masivo de palestinos en tan poco tiempo desde la 'Nakba' de 1948”,

'Al Jazeera' citando organizaciones palestinas de derechos humanos

Según la UNRWA, casi 1,5 millones de gazatíes, el 70% de la población de la Franja, han sido desplazados forzosamente al sur por las amenazas de Israel y por los bombardeos indiscriminados. Expulsados de sus casas hacia zonas donde también siguen cayendo misiles en casas, escuelas, hospitales, mezquitas, iglesias y panaderías.

“Es el mayor desplazamiento masivo de palestinos en tan poco tiempo desde la 'Nakba' de 1948”

'Al Jazeera' citando organizaciones palestinas de derechos humanos

Es ya “el mayor desplazamiento masivo de palestinos en un período de tiempo tan corto desde la Nakba de 1948”, aseguran organizaciones palestinas de derechos humanos. La Nakba, como se conoce al "gran desastre" palestino, comenzó después de la guerra de la coalición árabe contra el recién creado Estado de Israel, precisamente tras una votación de la Asamblea de las Naciones Unidas en 1947 que dividió en dos el territorio del mandato británico en Palestina.

Los países árabes rechazaron esta división y atacaron a Israel tras su declaración de independencia. Las fuerzas sionistas lograron no solo contener la ofensiva de Egipto, Siria, el Líbano, Yemen, Arabia Saudí, Transjordania e Irak, sino que se apoderó de alrededor de un 50% más del territorio que la ONU había establecido en sus tratados.

Durante el año y dos meses que duró esta primera guerra, entre 700.000 y 750.000 palestinos fueron expulsados de sus hogares y pueblos, se les arrebató su tierra y se pasaron a ser refugiados en países árabes vecinos, desplazados en Gaza y Cisjordania. Otros 500.000 palestinos corrieron la misma suerte las la Guerra de los Seis Días, en 1967.

¿Qué va a pasar con el millón y medio de palestinos expulsados al sur de Gaza? Dan por hecho que nunca podrán regresar a su casas; por eso alrededor de 400.000 civiles han preferido quedarse en sus hogares, o lo que queda de ellos, en el norte de la Franja, que ya está aislada del resto del enclave por una columna de soldados israelíes que han partido en dos Gaza.

Primera guerra declarada por Israel desde 1973

Israel no declaraba el estado de guerra en el país desde 1973, año de la guerra del Yom Kipur, 19 días en los que la coalición árabe con Egipto y Siria a la cabeza atacaron por sorpresa Israel para recuperar los Altos del Golán (Siria) y la zona del Sinaí (Egipto). Se calcula que los muertos entre la coalición árabe oscilaban entre los 5.000 y los 15.000, mientras que en el lado israelí no superaron los 3.000.

Israel ha matado en los últimos 31 días a más palestinos que durante las dos Intifadas (alrededor de 5.000 asesinados), y el primer ministro, Benjamín Netanyahu, ha rechazado declarar un alto el fuego humanitario, a pesar de las peticiones de la ONU, las sugerencias de su principal aliado, EEUU, y sobre todo, de las advertencias de Irán y su entorno, su principal enemigo en la región, que amenaza con entrar de lleno en la guerra. Las consecuencias de una escalada bélica multilateral en Oriente Medio son impredecibles y, sobre todo, indeseables.